¿Qué es la etiqueta de eficiencia energética?

Imagen etiqueta

La etiqueta de eficiencia energética es un documento que suplementa en parte el Certificado de Eficiencia Energética o certificado energético en la se resume de forma muy visual los datos más relevantes del certificado: La emisión de carbono de la casa (En kilos de carbono por metro cuadrados por año) y el consumo energético (En kiloVatios por metro cuadrado por año).

Para conseguir la etiqueta de eficiencia energética necesitamos primero conseguir nuestro certificado de eficiencia energética, tras lo cual si vivimos en un territorio que no sea de Cataluña, Catilla y León, Castilla-La Mancha, la Comunidad de Madrid o el País Vasco en cuanto el certificado energético se registre en el órgano competente para el Registro del Certificado Energético de la CCAA de la vivienda. En ese instante la etiqueta energética tendrá validez y una caducidad de 10 años. En caso de vivir en una de las comunidades autónomas mencionadas anteriormente se obtendrá la etiqueta en un plazo de máximo 3 meses (Las Castillas y PV), de 5 días (Cataluña) o de 2 días (Madrid).

Funcionamiento de la etiqueta de eficiencia energética

La etiqueta es el documento que la gente suele utilizar para dar información de su edificio, ya sea en inmobiliarias, para demostrar la calidad de la vivienda o para pedir subvenciones. Las etiquetas tienen una vigencia de una década, y en caso de obtener una y que la legislación cambie la etiqueta seguirá siendo válida hasta que caduque aún si demuestra que la vivienda ahora no cumple ciertos mínimos o algo parecido.

La etiqueta enseña la pieza informativa que más simplifica todo el certificado de eficiencia energética: La letra que le corresponde a nuestra vivienda. Y es que la mayoría de las veces solo nos fijamos en la más fundamental, siendo esto el color y la letra. Nadie se interesa por la cantidad de kilos de carbono por metro cuadrado por año gaste tu vivienda, y es que comprender algo parecido es muy complejo, aunque si hablamos de letras y colores todo el tema se simplifica muchísimo más, claro,

Por supuesto, más allá de la letra la etiqueta contiene más datos, como la ubicación, el tipo de edificio de la vivienda y su respectiva referencia catastral… pero esta información es más secundaria.

¿Cómo mejorar los valores de tu etiqueta?

Mejorar los valores de la etiqueta energética es un trabajo arduo, y es que para ello deberemos mejorar el certificado energético al que hace referencia la etiqueta en primer lugar, es decir, tendremos que llevar a cabo cambios en nuestra vivienda y después sacar un nuevo certificado de eficiencia energética. ¿De qué tipo de cambios estamos hablando? Obras, reformas y rehabilitaciones, y es que mejorar significativamente la nota del certificado sin recurrir a estos medios es prácticamente imposible. Las obras más comunes son la sustitución de ventanas, normalmente por aquellas de PVC, cambiar el aislante a ser posible por uno más adecuado, una acción en envolvente que cambie o mejore la envolvente térmica de la vivienda, cambiar el sistema de calefacción o refrigeración por uno superior o menos contaminante como la aerotermia, instalar placas solares que nos ayuden a reducir significativamente nuestra necesidad de energía exterior y por tanto nuestra emisión de carbono…

¿Cómo sacar provecho de mi etiqueta?

Como hemos explicado antes para mejorar una etiqueta energética más bien necesitamos sacar otra tras haber reformado nuestra vivienda. Bien, pues hay una gran cantidad de subvenciones a las que solo podremos acceder demostrando que, efectivamente, hemos realizado una obra que ha disminuido notablemente nuestra emisión o dependencia energética, normalmente el número mágico es un 30%, y es que si conseguimos demostrar que hemos reducido nuestro consumo un 30% podremos acceder a ayudas que nos ayudarán a pagar la reforma para que se amortice mucho antes. Hemos de destacar que es posible también conseguir algunas de estas ayudas con un solo certificado y etiqueta, pero para que este sea el caso deberemos tener una calificación mínima de B en el certificado (En este caso estamos hablando de una deducción de hasta 3000€).

Conclusión

La etiqueta energética es un resumen glorificado del certificado energético que nos sirve para demostrar valores complejos de nuestra vivienda de forma muy simple, así como poder acceder a subvenciones y poder demostrar que tenemos el certificado energético para poder vender o alquilar nuestra vivienda o inmueble. Es un documento muy resumido y que puede llegar a tener el tamaño de una pegatina, pero que tiene mucho valor simbólico gracias a la información que traspasa acerca de nuestro hogar y su consumo. Ha de aparecer en ofertas y publicidades relativas a la venta o el alquiler de la vivienda y adjuntarse al contrato de compraventa o alquiler a no ser que sea una de las excepciones que mencionamos en esta entrada de nuestro blog.