Los certificados energéticos están últimamente en boca de mucha gente, y es que las políticas europeas que pretenden luchar contra el cambio climático y el impacto medioambiental están popularizando estas acreditaciones.
Barcelona es la segunda ciudad en importancia y número de habitantes de España y cuenta con una arquitectura muy representativa que la convierte en una de las ciudades más turísticas del mundo. Es también una de las ciudades en las que más populares son los certificados de eficiencia energética y a continuación vamos a tratar todos los puntos relevantes a la hora de conseguir tu certificado energético en Barcelona.
El certificado de eficiencia energética es un documento oficial que mide y acredita los parámetros de eficiencia energética de un edificio, ya sea un inmueble residencial, un comercio, una nave industrial u otra.
Puede tener varios formatos o extensiones. Su formato más habitual a la hora de consultarlo es en PDF, pero el archivo oficial tiene una extensión CEX.
Visualmente es un documento con datos técnicos sobre el edificio que certifica y tiene información sobre varios parámetros de eficiencia y características de la vivienda.
Lo que sería el equivalente a la “nota” en un examen, que es a su vez el valor más relevante, es la calificación en cuanto a ‘Consumo de energía primaria no renovable’ y ‘Emisiones de dióxido de carbono’.
Las puntuaciones en estas áreas determinarán la letra de la A a la G tiene el certificado, siendo la A la letra que reporta una mayor calificación en cuanto a sostenibilidad y la G la que refleja una peor eficiencia.
Este documento es útil para evaluar la situación de tu vivienda o edificio en lo que respecta a eficiencia. Esto puede venir muy bien a la hora de valorar el impacto directo sobre el coste mensual energético y sobre la huella ambiental que las condiciones de tu vivienda provocan.
No obstante, es especialmente útil en algunos casos concretos. Por ejemplo, si vas a reformar tu vivienda, un certificado energético te ayudará enormemente a decidir qué tipo de obras pueden reportarte un mayor ahorro en las facturas de la luz y el gas.
También, de cara a vender una vivienda la certificación puede determinar si el posible comprador se decide por esa vivienda o por otra, dado que inmuebles con mayor eficiencia energética son más atractivos en el mercado.
Por último, algunas subvenciones que se otorgan por mejorar la sostenibilidad de tu hogar exigen que se cuente con certificados de eficiencia energética que acrediten una mejora energética.
Las subvenciones y ayudas públicas son uno de los grandes atractivos de los que puedes beneficiarte por contar con certificados de eficiencia energética.
En toda España, y por supuesto aplica a los habitantes de la provincia de Barcelona, hay disponible una deducción fiscal en la Declaración de la Renta de hasta 3.000€ al año durante 3 años (total de 9.000€) que puede aplicarse por haber emitido dos certificados energéticos y que entre ellos se obtenga una mejora de calificación.
Luego también a nivel nacional, hay convocada una ayuda para rehabilitación de viviendas que sigue activa en Barcelona y con la que puedes recuperar hasta el 80% de lo que gastes en rehabilitar tu vivienda. Esta subvención también tiene como requisito contar con dos certificados.
Por último, los municipios pueden también convocar deducciones en sus impuestos (el más popular es el IBI). Estas ayudas están disponibles en solo algunos municipios, aunque Barcelona es una de las provincias que más apoyo brindan a las energías renovables y hay convocatorias abiertas en un gran número de localidades. En algunos casos, aunque no es lo habitual, pueden requerir también los certificados energéticos como parte de la documentación que acompaña a esta solicitud.
Desde junio de 2013, en España el certificado energético no solo es útil y recomendable, sino que también es obligatorio en estos 2 casos:
Estos documentos se anexan al contrato de alquiler o de compraventa y no cumplir con esta obligación puede acarrear importantes consecuencias económicas, con multas de hasta 6.000€ dependiendo del tipo de infracción.
Barcelona es una provincia con una posición que hace que la mayor parte de la población de la provincia se encuentre en un clima mediterráneo costero donde las precipitaciones son algo escasas, pero en el que el grado de humedad relativa es grande comparado con la media española, cosa que facilita que las viviendas tengan elementos relevantes al certificado energético que requieren de una mayor inversión debido al constante maltrato de la humedad, lo que hace vital el tener un certificado que acredite que el edificio o vivienda en cuestión tienen un buen mantenimiento.
Esta situación hace que los barceloneses gasten mucho dinero en mantener los elementos del hogar, pudiendo algunos elementos como los tejados, ventanas o puertas deteriorarse mucho más rápido de lo que deberían.
Conocer los puntos débiles de tu vivienda a la hora de mantener éstos en un estado adecuado puede ahorrarte muchos costosos improvistos, revalorizar y abaratar la vivencia en el hogar. Un certificado energético de proyecto te puede indicar qué ventanas, aislante o calefacción podría llegar a tener tu inmueble tras unas posibles remodelaciones y determinar así si estos cambios merecerían la pena o si ya te encuentras en un estado óptimo.
La solución es bastante similar en todo el país, y por supuesto, la ciudad Condal no es una excepción. El consejo general para mejorar tu certificación energética es renovar y aislar correctamente tu tejado, insuflar aislante en las paredes, sustituir puertas y ventanas, cambiar las molduras de éstas y reemplazar los equipos productores, como calderas y aires acondicionados, por otros de mayor eficiencia, como la biomasa, por ejemplo.
Concretamente en Barcelona, es interesante optar por elementos de materiales que sean resistentes a la humedad mencionada anteriormente. Algunos ejemplos podrían ser puertas revestidas, aislamiento de paredes exteriores o ventanas aislantes.
Además, la instalación de placas solares también te ayudará a mejorar tu puntuación sostenible, dado que si bien por si solas no te ayudarán a gastar menos energía, ésta será limpia y sí se notará en las facturas energéticas, que serán significativamente menores.
La ciudad de Barcelona cuenta con un 81% de edificios con una calificación energética E o menor y es que en la capital de provincia solo uno de cada diez edificios se han construido a partir de los ochenta, con la normativa de eficiencia energética más antigua de España, por lo que nos encontramos ante una situación precaria en términos contemporáneos.
La ciudad ocupa un espacio en el que el certificado energético promedio no cumple con las expectativas energéticas actuales, y es por ello que en esta situación una mejora, por pequeña que sea, puede suponer el diferenciar el piso o inmueble en cuestión de una enorme mayoría que compone este grupo con calificaciones insuficientes.
La ciudad presenta grandes contrastes entre sus distritos, siendo el más característico y poblado de éstos, el Ensanche, un claro ejemplo de la falta de reformas que se produce en la mayoría de los inmuebles de la ciudad.
La popularización de los certificados energéticos puede ayudar a que más propietarios sean conscientes de las condiciones de sus viviendas y del impacto que tiene sobre el medioambiente y sobre su bolsillo.
Barcelona como provincia se encuentra a la cabeza de la CCAA que más energía produce sin emisiones de gases de efecto invernadero, sin embargo, estos resultados se ven coartados por los elevados niveles de emisiones CO2 presentes en la capital de provincia y otras ciudades de la provincia como Hospitalet, Tarrasa o Badalona.
Unos edificios tan antiguos como los de la ciudad capital cuentan con un gran margen de mejora para reducir gastos, aumentar el nivel de vida y revalorizar los inmuebles con la ayuda de los certificados energéticos.
La provincia de Barcelona cuenta con una precipitación anual media inferior a la media nacional, pero con una humedad superior debido a la cercanía al mar y una amplitud termica moderada debida al clima mediterráneo.
Las oscilaciones de temperaturas no son muy marcadas, siendo los inviernos suaves y los veranos calurosos, cuando si bien la temperatura media es agradable, la sensación termica no lo es, ya que la humedad vuelve las zonas más densamentes pobladas bochornosas durante buena parte del verano.
El clima de la provincia tiene unas variaciones sutiles gracias a sus múltiples unidades morfoestructurales: las depresiones litoral y prelitoral, sus respectivas cordilleras homónimas, la depresión central catalana y el Prepirineo. Las primeras con un clima Med. costero, la penúltima principalmente con uno Med. continentalizado de veranos cálidos y la última con un clima Med. subhúmedo. Los certificado de eficiencia energética reflejan una situación en la provincia en la que los edificios antiguos con condiciones muy mejorables son la norma, aunque también cabe resaltar que también estan surgiendo edificios modernos con mejores condiciones, aun cuando estos se ven limitados al espacio metropolitano en su enorme mayoría.
La provincia cuenta con unas reservas de agua muy pequeñas en comparación con la media provincial, cosa que se acentúa más considerando su enorme población. La infraestructura de embalses cubre una quinta parte del agua de la provincia, parte que en cómputo con lo mencionado anteriormente hace que el territorio barcelonés sea especialmente vulnerable a periodos de sequía.
Además del propio documento oficial del certificado energético y su registro en la correspondiente consejería de industria de la CCAA, se encuentra un documento anexo que es posiblemente el más reconocible para todos. Hablamos de la etiqueta energética. Es ese punto del certificado que se compone de letras en orden alfabético con colores verdes que denotan la calificación más eficiente a las primeras letras (A,A+,A++) y colores rojos para las menos eficientes (E,F,G).
En toda la CCAA esta etiqueta se da al momento, cosa que es un añadido en comparación con otras que tardan considerablemente más.
En cualquier caso, es importante saber que la etiqueta energética no es obligatoria y que tiene un carácter más bien “ornamental e informativo”. De cara a la compraventa, alquiler o solicitud de subvenciones y ayudas lo que necesitamos es el Certificado de Eficiencia energético sellado por Industria, no la etiqueta.
Nosotros trabajamos en cualquier municipio de la provincia. Por ejemplo:
Hospitalet es el segundo municipio por habitantes del territorio. Está situado al sudoeste de la capital y solía actuar como ciudad dormitorio de la misma, siendo frecuentes los desplazamientos a ésta. Sin embargo la ciudad ha transitado a un carácter más comercial durante la segunda mitad del periodo democrático contemporáneo.
Las mayores agrupaciones de viviendas se encuentran por norma general en el norte de la ciudad y suelen ser plurifamiliares como resultado del pasado próximo mencionado, mientras que la parte sur de ésta está más marcada por edificios comerciales o empresariales, ocupando el polígono industrial una parte notable de la ciudad. Las viviendas de obra nueva que se encuentran en el norte empiezan a construirse ahora de forma menos concentrada, habilitando la aparición de parques, centros comerciales y campos de fútbol con una marcada funcionalidad urbana.
Desde Certificados Energéticos CEE trabajamos a menudo en este municipio y sus alrededores.
Tarrasa es una ciudad / municipio con una gran historia que ha dejado a la ciudad con una buena cantidad de edificios modernistas, así como el sobrenombre de “la ciudad de las fábrias de vapor”. Está situada ligeramente al sur de la provincia, al noroeste de la capital.
Las viviendas suelen ser edificios de pisos, y las urbanizaciones de viviendas en las afueras también son frecuentes aunque son marcadamente más dispersas.
Puedes obtener tu certificado de eficiencia energética en este municipio y en sus vecinidades con nosotros.
Para obtener tu certificación energética en Badalona y alrededores, puedes contar con nosotros. Este municipio colindante al noreste con Barcelona tuvo gran protagonismo en el pasado y a día de hoy sigue siendo casa de alrededor de 220.000 badalonenses.
La ciudad no cuenta con muchos edificios nuevos cortesía de una población que se encuentra algo estancada desde hace casi medio siglo, sin embargo es habitual encontrar edificios antiguos que se han ido reformando con el paso del tiempo. Es un municipio con gran potencial en lo que a reforma de pisos se refiere debido a la edad media de éstos.
La ciudad / municipio de Sabadell se encuentra en una situación geográfica similar a la de Terrasa, y es que se encuentra separada de ésta por menos de 5 Km al este, por lo que se encuentra directamente al norte de la capital.
La situación poblacional es favorable, ya que la ciudad está creciendo lenta, pero contínuamente. Los edificios más emblemáticos son del comienzo del siglo XX. La historia de la ciudad con respecto al sector textil que en su día fue el motor del municipio le ganó el apodo de “la Mánchester catalana”.
Un certificado energético en Sabadell puede ser una opción interesante para actualizar tu edificio si es antiguo o para acreditar la eficiencia de éste si es nuevo.
Mataró es una ciudad costera intermedia con mucho potencial en varios ámbitos relevantes como pueden ser la instalación de placas solares debido al extendido uso de tejados planos y el apoyo del ayuntamiento, que está fomentando varios programas de rehabilitación urbana de algunos barrios como Rocafonda.
Destaca la concentración urbana presente en la ciudad, que se hace más aparente en su parte sudeste. En la ciudad el edificio promedio es multifamiliar, en los que el certificado energético puede ayudar a las comunidades a ponerse de acuerdo para hacer mejoras clave a los inmuebles que aumenten su calidad de vida y reduzcan sus costes energéticos.
En Santa Coloma de Gramanet predominan viviendas con un menor grado de concentración, especialmente en la mitad superior de la ciudad cortada por el parque Europa, con un desarrollo más denso hacia el sur, en el que predominan construcciones plurifamiliares.
Un certificado de eficiencia energética puede hacer mucho más atractiva la venta o alquiler de una vivienda en un municipio que está tan cerca de Barcelona y que tiene tantas posibilidades.
Sant Cugat del Vallés es una ciudad con un crecimiento muy grande en proporción a su tamaño. Esto propicia la construcción de nuevos edificios en los que los certificados energéticos cuentan con un nivel superior a la media provincial por ser tan novedosos.
Sant Cugat es una de las ciudades que más se expanden de la provincia y de Cataluña en su totalidad, lo que hace de ésta una ciudad joven en la que hace un siglo no había ni una vigésima parte de su población actual, cosa que demuestra la marcada importancia de este nuevo municipio en el ámbito barcelonés.
Tanto en Sant Cugat como en municipios de los alrededores realizamos los certificados energéticos al mejor precio y con la mayor profesionalidad.
Castelldefells es otra ciudad con un boom poblacional que se hace la envidia del resto del país. Su ubicación cerca de la capital catalana y del aeropuerto Josep Tarradellas hace de este un municipio que parece que va a seguir creciendo durante unas décadas más como mínimo, lo cual se traduce en una ciudad novedosa y renovada que va a ser puntera en el ámbito energético.
La necesidad de los certificados energéticos para construir nuevos edificios o para revalorizar o planear remodelaciones en los existentes hace que sea una ciudad con una proporción muy grande de certificados de un nivel por encima del promedio, con lo cual se vuelven éstos algo indispensable para que los inmuebles no se queden por debajo de la media, y es que para conocer qué tipo de reforma puede impactar positivamente sobre la eficiencia de la vivienda es muy recomendable que contrates un certificado energético.
Gavá es otra ciudad con una posición privilegiada en la provincia. En su caso la población también ha experimentado un crecimiento rapidísimo, con algunos datos de crecimiento haciendo que la población duplicara su número de habitantes en un par de décadas del siglo pasado. Sin embargo, este crecimiento demográfico parece haber alcanzado ya su clímax alrededor de la década de los 2000 y ahora se encuentra en una situación estable.
El rápido crecimiento de la ciudad instó una construcción acelerada que a día de hoy se está consolidando en una calificación promedia con la que la necesidad de reformas suele estar a la orden del día, por lo que nos encontramos activos en el municipio para ayudar en estos casos a conseguir adaptarlos a las condiciones del presente.
Para conocer qué tipo de reforma puede impactar positivamente sobre la eficiencia de la vivienda es muy recomendable que contrates un certificado energético.